Barrios

Como en todas las ciudades, hay una gran diferencia entre hablar de las zonas en las que se encuentra la parte histórica y sus monumentos (es decir las zonas turísticas), y las zonas residenciales y más típocas de los locales.

Por lo tanto, hay una diferencia entre divisiones turísticas y divisiones administrativas.

En lo que se refiere a estas últimas, Praga se divide en 22 distritos denominados con números, de manera que el 1 se corresponde con el centro de la ciudad y cuanto más crecen más se alejan de él.

Para alojarte puedes barajar cualquiera de ellas, pero te aconsejo que si puedes te hospedes en la zona 1 o la 2, siendo esta última muy económica.

No te preocupes porque casi todas las cosas que vas a visitar se encuentran en la zona 1 y como mucho tienens que cruzar el río y subir alguna que otra cuesta para llegar a ellas.

Aún así, si nos centramos en lo que te interesa cuando vayas a visitar la ciudad, has de saber que la zona histórica tiene 6 zonas diferentes.

Vamos a ver los diferentes barrios, su situación y lo que puedes encontrar en ellos.

Castillo de Praga y Hradcany

Es una de las zonas más antiguas de Praga, desde que el en siglo IX el príncipe Borivoj decidió emplazar en este lugar el Castillo de Praga.

En torno a este núcleo se asentaron muchos años después toda la gente que tenía que realizar servicios para el interior del castillo y para aprovechar las ventajas que ofrecía esta colina elevada cerca del curso del Moldava.

En este mismo sitio, años después se asentaron los reyes de Bohemia y comenzaron a crear todos los centros del poder en esa zona dotándola de una muralla que garantizase su seguridad.

Fue una zona en constante construcción y cambio debido a diversos acontecimientos históricos y religiosos, y aunque se le denomine castillo no lo es como tal, sino un complejo donde se encuentran las construcciones más importantes a nivel religioso y administrativo. Estos son:

• Catedral de San Vito.

• Antiguo Palacio Real y hoy despacho del presidente.

• Callejón del Oro.

• Las antiguas prisiones (Torre Daliborka y Torre Blanca).

• Basílica y Convento de San Jorge.

• el Loreto.

• Monasterio de Strahov.

• los palacios de los nobles que se establecieron en esta zona buscando la protección del recinto amurallado y que hoy en día son importantes galerías de arte con colecciones de artistas mundialmente reconocidos.

Vysehrad

Esta es otra de las zonas originarias y primitivas de esta ciudad, aquí precisamente fue donde se levantó el otro castillo, el de la dinastía premíslida.

Fue uno de los barrios independientes de la ciduad hasta que se produjo la unificación de todos ellos.

Hoy en día aún puedes dar un paseo por lo alto de llas murallas, disfrutar de la paz de sus jardines con estatuas realmente bonitas y entrar en la iglesia de San Pedro y San Pablo.

Además aquí está un cementerio bastante espectacular y especial, en el que se encuentran enterradas personalidades importantes y famosas.

En muchos portales o guías turísticas casi no lo nombran, pero No dudes en ir, ya que no te defraudará.

Plaza de la Ciudad Vieja y Staré Mesto

Esta es la zona que se conoce como Ciudad Vieja, aunque no es la más antigua.

Esta zona se fue formando por los burgueses que no residían dentro de la zona del castillo. Es donde más se respira ese aire medieval y el estilo gótico de sus arquitecturas ennegrecidas pero puntiagudas y tan características.

Esta zona tampoco se queda corta en lo que a puntos interesantes se refiere, ya que aquí encontraremos

• Antiguo ayuntamiento

• Reloj astronómico

• Iglesia de Týn

• Iglesia de San Nicolás

• Clementinum

• Puente Carlos

• Torre Pólvora

Barrio Judío (Josefov)

Se encuentra muy cerca de la zona vieja de la ciudad y es el lugar que ocuparon las dos comunidades de judíos que existían en la Edad Media, o más bien al lugar al que los destinaron durante la Edad Media.

Antes estaban separadas cada una de ellas en torno al núcleo de las dos sinagogas más importantes que hoy aún se coservan: la Sinagoga Staronová (Vieja-nueva) y la Sinagoga Española.

A mediados del siglo XIX, este barrio por fin fue integrado en la ciudad de Praga, por lo que fue sometido a una reforma considerable y aunque en la actualidad es uno de los barrios judíos mejor conservados de toda Europa, se conserva muy poco desde entonces: Cementerio, Museo y 6 sinagogas.

Malá Strana y monte Petrín

Esta es la zona que queda entre el Castillo y el río Moldava. Su nombre en checo significa "ciudad pequeña" y también es una de las más antiguas de la ciudad.

Además, esta zona se ha conservado bastante bien a lo largo de los años y, aunque no tiene tanta fama como la ciudad vieja o la zona del Castillo, también tiene su encanto y bonitos edificios entre los que pasear.

Las visitas más importantes en este barrio son la plaza principal, Malostranské Námestí, en la cual también se puede acceder a la Iglesia de San Nicolás, perfecto ejemplo del barroco y otro templo, el de Nuestra Señora de la Victoria.

Este barrio quizás es el que ofrece más zonas verdes en las que pararse un poco a descansar, a disfrutar de las vistas y respirar aire y alejarse del bullicio de las zonas más turísticas y visitadas.

De hecho cuenta con 3 zonas verdes importantes, como son el Jardín Vrtba, el Monte Petrin, con su torre metálica desde la que contemplar toda la ciudad, y la Isla Kampa en medio del río.

Nové Mesto

Este es el nombre checo para denominar a la zona nueva de la ciudad, ya se creó hace solo unos 700 años, que ya nos puede parecer bastante, pero ten en cuenta que los orígenes y el primer asentamiento de Praga se remonta al siglo IX-X.

El fundador y promotor de toda esta zona fue el rey Carlos IV y desde entonces ha sido testigo de los acontecimientos históricos más importantes, no solo para la ciudad sino para el país entero, como las ocupaciones y desfiles nazis, la revolución del terciopelo….

El lugar más importante de esta zona es la enorme Plaza Wenceslao, antiguo mercado de caballos y ganado y ahora lugar destinado al ocio, por todas sus tiendas, bares, restaurantes y hoteles.

Además, en este lugar se encuentra uno de los museos más importantes de la ciudad, el impresionante Museo Nacional.

Pero hay muchas más cosas que ver en esta zona además de la plaza y el museo.

En las cercanías encontrarás otros puntos emblemáticos como:

•  Ópera Estatal.
• Teatro Nacional.
• La Casa Danzante.
• Casa Municipal de Praga.
• Museo del Comunismo.
• Museo Mucha.

Fuera del recorrido habitual y alejándonos un poco de Praga 1,nos encontramos con barrios famosos y que contienen historia y cosas por descubrir. No te estoy diciendo que recorras los 22 distritos, pero hay un par de ellos que están realmente bien y te sorprenderán.

Vinohrady y Žižkov

Žižkov es uno de estos ejemplos, para descubrirlo tendrás que desplazarte hasta Praga 3.

Fue un barrio muy concurrido por la población proletaria de la ciudad, así como también por los artistas y bohemios. Esto se debía a la alegría que desprendían los pequeños bares y cabarets que había.

Allí vivió gente importante en el terreno cultura, de hecho el único ganador de un nobel de literatura tenía su residencia en este barrrio.

Hoy en día es un lugar muy cambiante pero sigue conservando ese carácter bohemio de antaño, vamos que es el barrio “hipster” de la ciudad.

Si te sobra tiempo en tu estancia, o eres de los que prefiere adentrarse en barrios residenciales o alejarse de la marabunta turística te comento lo que has de ver aquí:

• Paseo por Vinoharady Real, recorrido por el barrio con unos edificios preciosos de estilo modernista, aunque también hay otros estilos, incorporando las últimas novedades. Antiguamente estos terrenos estaban cubiertos de viñas, de ahí el nombre.

• Torre televisión.

• Cervecerías locales.

Holešovice

Este barrio que tampoco se incluyen en las visitas de Praga es en parte también como el bohemio Žižkov, ya que presenta muchos edificios modernistas, pero al mismo tiempo también se pueden observar las pegadas del pasado industrial de la zona.

De hecho esta zona era la que se encargaba de albergar los lugares de producción y comercio para la ciudad, además durante el siglo XX aún se construyeron más fábricas.

Hoy en día estas ya no están en funcionamiento, pero se le ha dado una segunda vida y ahora acogen a complejos de oficinas, estudios para los artistas, diseñadores o arquitectos.

Esta es la tónica general de este barrio, en el que te encontrarás a cada paso con cafeterías mu modernas, galerías de arte, tiendas en las que se venden los productos de los diseñadores, todo muy moderno y lleno de vida.