Prague Card

Hoy en día casi todas las ciudades que cuentan con numerosos atractivos turísticos y que saben que reciben a miles de turistas todos los años, disponen de tarjetas para poder disfrutar de sus monumentos por un precio más reducido e incluyendo numerosas ventajas.

Praga no podía ser menos y tiene la tarjeta Prague Card.

Qué es la Prague Card

Esta tarjeta es un bono que te permite entrar a los principales monumentos sin tener que hacer un pago en cada uno de ellos, ya que pagas por adquirir la tarjeta que te da acceso a 60 monumentos, entre los que se encuentran los principales.

Si deseas visitar alguno de los que no está incluido, la tarjeta tiene diferentes descuentos para ellos.

Además también incluye algunas actividades extra, fuera de los lugares y monumentos de interés, como un crucero por el río, un tour en autobús turístico y descuentos en restaurantes y espectáculos.

Es importante que tengaS en cuenta que desde el 2019 no se incluye ningún tipo de transporte público en esta, ni metro, ni tranvía ni bus, solo el bus turístico y un crucero por el río. Si tenías pensado comprarla por esto específicamente siento comunicarte que no es posible.

Te facilito la lista de algunos lugares y monumentos que entran en cualquiera de sus modalidades sin pagar ningún céntimo extra (la lista completa incluye 60 lugares):

• Castillo de Praga (bono B).

• Catedral de San Vito.

• Callejón del Oro.

• Palacio Real.

• Palacio de Sternberg.

• Palacio de Troya.

• Torre Daliborka.

• Torre de la Pólvora.

• Museo judío y sinagogas

• Ayuntamiento de la Ciudad Vieja.

• Mirador de Petrín

• Funicular de Petrín.

• Laberinto de los espejos de Petrín.

• Museo de Praga.

• Museo Checo de la Música.

• Museo Nacional.

• Lapidario del Museo Nacional.

• Museo Naprstek.

• Basílica San Pedro y San Pablo (Vysehrad).

• Zoo de Praga.

Hay otra serie de lugares importantes en la visita de la ciudad que no están cubiertos con la tarjeta, pero que te descuentan porcentajes interesantes como:

• Loreto

• Clementinum

• Casa Municipal

• Torre Ciudad Vieja

• Torre San Vito

• Búnker nuclear

• Museo Chocolate

Si te convence la idea de hacerte con una lo mejor es que la reserves de manera online en casa antes de hacer el viaje y una vez llegado allí solo tendrás que recogerla en alguno de los puntos de atención turística que hay por toda la ciudad.

Cómo funciona

Su funcionamiento es muy sencillo; una vez que la has adquirido se activa en el momento en que la utilices por primera vez, a la entrada del primer monumento que visites. Entonces estará activa y vigente tantos días como hayas seleccionado (2, 3 o 4).

La vigencia es para días naturales, así que da igual que el primer día no la hayas activado hasta mediodía o por la tarde, ese día entero ya te cuenta, de modo que ten esto en cuenta.

Es válida para todos los monumentos que incluye, pero solo podrás realizar una única visita a cada uno de ellos, así que no cuentes con ir más de una vez porque un día estás cansado y quieres volver. Puedes hacerlo, pero tendrás que pagar.

Es importante que en el momento de adquirirla pongas tus datos, tu nombre y la fecha del día que comienzas a usarla, ya que así las diferentes personas que trabajan en los monumentos podrán corroborar la validez de la misma.

Tarifas y precios

Las tarifas y precios dependen de la modalidad de tarjeta que escojas, ya que hay 3 diferentes, dependiendo del número de días que vayas a estar en la ciudad o que la quieras utilizar.

Las modalidades y sus precios son:

• 2 días: 62€ (adultos), 46€ (estudiantes y niños).

• 3 días: 72€ (adultos), 53€ (estudiantes y niños).

• 4 días: 83€ (adultos), 61€ (estudiantes y niños).

Si te estás preguntando si te compensa, lo que tienes que hacer es echar cuentas de los días que vas a estar en la ciudad, de manera seguida, ya que si activas la tarjeta de dos días, y al siguiente te vas a hacer una excursión fuera,cuando vuelvas al siguiente ya no te será válida.

También debes consultar la lista de monumentos que incluye y mirar si te interesan todos, solo alguno y el precio que tiene cada uno de ellos. Si al hacer la suma ves que es mucho más alta que la de la tarjeta te compensa, si anda ahí ahí a lo mejor no, porque puede que al final no vayas a todos.

Es cuestión de echar cuentas sobre los lugares que quieres visitar, su precio, el tiempo que tardarías en verlos y comparar con el precio de la tarjeta correspondiente a esos días.